lunes, 22 de febrero de 2010

injurious trolls, día dos.
después de dormir cada uno en su camita, pos arriba to dios y a dar una vuelta por la pequeña ciudad de geiranger.
estas eran nuestras cabin. todo precioso.
luego pillamos los coches y parriba la montaña, y de caminata, again.
no voy a volver a dar la brasa con que si caminatas, que si todo precioso, etc. etc. todo precioso.
luego pillamos los coches y recorrimos zonas de geiranger interesantes, o para subir a miradores, lo normal.
luego sesión de fotos con el troll de geiranger
la de grupo la tengo en el caralibro.
un poco más de vuelta por la zona, vuelta a las cabins, relax y fiesta, again. esta vez sin acontecimientos de llaves ni nada similar.
que recuerde.

lunes, 8 de febrero de 2010

injurious trolls, día uno.
ok, cumpliendo lo dicho. corría un dos de octubre de dos mil nueve, sí, hace cinco meses, soy lo puto peor, que veinte personas decidimos darnos una vuelta por la tierra de los trolls. así que alquilamos cuatro coches y pusimos rumbo a geiranger.
no me acuerdo ahora mismo cuanto tardamos, creo que unas cuatro o como mucho cinco horas de coche, tengo que recapitular detalles viendo las fotos, porque no me acuerdo al cien por cien.
para ir pasamos por la llamada ruta de los trolls, que básicamente es una carretera no apta para gente que esté mal del corazón, subiendo (o bajando), por curvas de doscientos setenta grados, con nieve y bueno, carretera mierda estilo noruega. subimos una montaña con la ruta esta y todo lleno de nieve, y cómo aún no habíamos disfrutado nada de la nieve, pos como niños un rato.
luego, ya abajo de la montaña a la altura del mar, a esperar que un ferry nos llevara hasta nuestro destino final.
esperando al ferry. nuestros cuatro coches.
del otro lado del ferry al fiordo de geiranger en todo su esplendor.
geiranger al fondo.
llegamos ya por la tarde a nuestras cabins, que realmente estaban muy bien, y a pié de fiordo, con vistas espectaculares. pero ya anocheciendo por lo que las fotos para el día después. dejamos mochilas en las cabins, preparamos cenas, etc.
y llegó la noche, y el alcohol, y los chistes, etc. la cuestión, veinte personas dentro de una cabin para cinco, pos a ponerse a tono y el calorcito no tardó en llegar. cuando nos dimos cuenta eran las tantas de la madrugada y la peña decía que a bañarse al fiordo por la noche. pos nada, todos fuera de las cabins, en eso que yo llevaba la llave de mi cabin (mía y otros cuatro) y va y uno de mi cabin me pide que le pase la llave que necesita nosequé. al tanto, de noche, algo dobladillo, etc. pos ni corto ni perezoso le lancé la llave, mi compi que tampoco es que fuera a aprobar un test de alcoholemia pos puso la mano al aire con buena voluntad, pero como que la llave le paso por otro lado. llave al cesped y de noche. pos ale, ya libre albedrío, unos que si bañándose en el fiordo, otros buscando la llave como tontos/locos por el cesped, otros bla.
pos eso, estuvimos buscando la fucking llave un buen rato, y al final ya desistimos porque era imposible, no se veía nada. buscábamos con mecheros, mini linternas, hasta haciendo fotos con flash por zonas y viendo en las fotos si estaba la llave. ya nos habíamos rendido, y hablado el distribuirnos los cinco afectados para dormir en el resto de cabins y al día siguiente hablar con el dueño en plan que se han perdido matarile o buscar ya con luz y tener suerte. bueno, la cuestión es que el chaval y yo decidimos hacer una última ronda de búsqueda, y apareció, no se como pero la llave apareció, la joputa, además de enana, tenía el llavero de plástico de color verde como el césped y el puto llavero cubría la llave, por lo que el metal no brillaba con las luces ni los flashes. pero apareció.
¿dónde están las llaves? matarile-rile-rile, ¿dónde están las llaves? matarile-rile-ron, pim-pon.
ale, a dormir la mona cada uno en su cama, al día siguiente, more.